Algo de esto te tiene alterado

Estar calmado es sencillo.

O complejo.

Esto va a depender de ti, así que podríamos decir que es complejo.

Pero se convierte en algo sencillo cuando encuentras el truco.

Hay muchas cosas que te pueden alterar.

Muchas.

Entre todas las que se me ocurren ahora mismo, podrías estar:

Pensando demasiado (overthink que llaman los inglaterranos).

Desmotivado.

Asustado.

Bloqueado.

Confuso.

Frustrado.

Agotado.

Poco inspirado.

Impaciente.

Seguro que sientes alguna de esas sensaciones ahora.

O la has sentido hace poco.

Vale, puedes decir que estar en la mierda.

Pero ya está.

Todo se puede afrontar.

Todo.

Hay gente que decide no afrontarlo.

Pero tú no tienes que ser de esa gente.

Tú tienes que ser de la gente que lo afronte.

Además, te recomiendo encarecidamente que no lo pienses mucho.

Si piensas demasiado, escribe.

Si estás desmotivado, recuerda el motivo por el que estás haciendo lo que estás haciendo. Tu “por qué”.

Si estás asustado, arriésgate.

Si estás bloqueado, sal a caminar.

Si estás confuso, haz las preguntas que tengas que hacer.

Si estás frustrado, muévete, haz deporte, ocupa tu cabeza con algo.

Si estás agotado, duerme.

Si estás poco inspirado, lee.

Si estás impaciente, mira a dónde has llegado. Revisa todo el camino que has andado.

Observa.

Todo se puede afrontar desde una perspectiva diferente.

Quédate si quieres en el problema. Otros estarán ya abordando la solución.

Tampoco se trata de una carrera.

Se trata de ver cuánto tiempo de tu vida has tenido la mente sana.

Has disfrutado de tus plenas capacidades.

Va a haber gente que te quiera joder.

Y va a haber momentos jodidos.

Pero como te los tomes y los afrontes solo va a depender de ti.

Observa cómo lo afrontan los demás.

Y piensa si quieres vivir como los demás.

Si no quieres hacer lo que hacen los demás, mejor que leas.