Atiende y entiende
Observa
La gente no necesita mucho.
Solo quiere ser entendida y atendida.
Si eres capaz de proporcionar esto tienes el éxito en las relaciones asegurado.
Atento, atenta, atente…
Hace no mucho estuve en una reunión.
Bueno aquello era más bien una asamblea porque éramos unos 40 en un salón.
Estaban molestos.
No conmigo.
O a lo mejor alguno conmigo, pero no todos.
Estaban molestos por el trato que se les estaba dando.
Porque no se estaban atendiendo sus llamadas de socorro.
Estas personas con las que yo me reunía eran familias en una comunidad de propietarios que “acaban” de comprar una vivienda.
No eran viviendas cualquiera.
Estamos hablando de viviendas que algunos nunca podrían permitirse en su vida.
El mayor problema que tenían estas familias con las que me reunía es que la constructora / promotora, les había dejado demasiados desperfectos.
Desperfectos en las zonas comunes y ni te cuento en las viviendas.
Te estoy hablando de cosas gordas:
El suelo radiante de las viviendas reventaba e inundaba las estancias.
Problemas con las bajantes que filtraban las viviendas y provocaban inundaciones a los de abajo.
Jardines de las zonas comunes sin plantar o con plantas muertas directamente.
Era todo un espectáculo aquella comunidad.
Pero a ellos eso les daba igual.
No les importaba que estuviera mal.
Les importaba que, quien tenía que arreglarlo, no estuviera allí.
No atendían a sus llamadas.
Sus llamadas de socorro.
Como bien sabes (y si no lo sabes te lo cuento), mi trabajo va de dar la cara y que te la muelan a hostias vivas.
Como administrados, aunque no tengas la culpa, te la echan o te hacen responsable de las cosas.
Solo por estar en medio.
Aunque tú no vayas allí a poner los ladrillos.
Da igual, te llueven palos.
Y eso es una cosa que me encanta de esta profesión.
Observa.
La gente solo quiere ser atendida y entendida.
Es lo que querían ellos.
Hablar con alguien.
Desahogarse. Contar sus problemas y que alguien hiciera algo por ellos.
Y en vista de que nadie lo estaba haciendo pues lo iba a hacer yo.
Porque me gusta aprovechar la incompetencia de los demás.
La incompetencia de la gente que no observa ni se da cuenta de lo que necesitan los clientes.
Porque, como comenté en otras observaciones: da lo que la gente necesite, no lo que la gente te pide.
Y allí estaba yo.
Recibiendo palos al principio.
Y muestras de afecto al final.
Porque cuando observas, te das cuenta de lo que la gente necesita.
La gente necesita cercanía.
Sentirse atendida y entendida.
Y eso era lo que yo les quería transmitir.
Que por mi parte iban a estarlo.
Que no se preocuparan.
Porque para eso estaba yo allí un lunes a las 9 de la noche.
Para hacer cosas por ellos.
Y es que cuando observas, la hora te da igual.
Porque cuando observas descubres tantas cosas que puedes aprovechar en esta vida que te sientes idiota si no las aprovechas.
Por eso debes aprovechar todo lo que te cuento y observo todos los días aquí.
PD: Si no has leído mi otra observación para dar un buen servicio sin dar a la gente lo que te pide, léelo aquí.