Despojos de la humanidad
Lo he dicho ya. Por suerte tengo mucho trabajo.
Más trabajo del que quiero y, por supuesto, más trabajo del que puedo asumir.
Si fuera mi empresa pensaría en cómo subir el precio. Mucho. Muchísimo.
De hecho, creo que mi jefe ya lo está considerando y yo quiero ayudarle con ello.
Mi jefe es un crack, pero ya hablaré de eso en otro momento.
De vuelta al trabajo.
Ahora no. Digo al tema, que sino no termino el mail.
Te cuento una historia mitológica:
Licaón era el rey de Arcadia (un sitio bastante recóndito, no sabrías encontrarlo en el mapa). Y este hombre era un personaje. No de gracioso, sino de tirano. Se le conocía por tratar mal a todo el mundo y, sobre todo, por sacrificar peregrinos.
Un día Zeus se apareció en su palacio disfrazado de viajero, la mayor tentación de este tipo.
Zeus sabía lo que se hacía…
Licaón que vivía rodeado de sabios (si Pedro Sánchez tiene un comité de +1800 asesores, este hombre también tenía derecho) fue advertido de que este extranjero podría ser una divinidad.
Para ponerlo a prueba, el zorro de Licaón hizo algo extremadamente cruel: asesinar y cocinar a uno de sus hijos para dárselo de comer a Zeus.
Imagínate la que se montó cuando Zeus se enteró…
Fíjate que si se la lió que le quemó el palacio y, por si fuera poco, le convirtió en lobo.
Despojándole así de las cualidades humanas de la razón y la compasión.
¿Y qué tiene esto que ver?
Pues que a veces la gente pierde la compasión y la humanidad o parece que no le riega la sangre al cerebro.
Parece que no son capaces de identificar cuando alguien está haciendo su trabajo y, a pesar de ello, les exige, les presiona, les pincha, les retuerce.
Hasta sacarle todo lo que puede.
Eso me lo intentan hacer a mí a diario.
A mí particularmente me parece divertido porque es una forma más de observar el comportamiento humano.
Hay gente que no se lo toma así y le puedes joder.
Y me da pena cuando alguien no lo entiende. Me da pena cuando la gente pierde la humanidad como Licaón y no empatiza. Quieren que empaticen con él, pero él no quiere empatizar. Una paradoja, eh.
Antes de pararte a exigirle nada a nadie que está haciendo su trabajo párate a pensar si le estás jodiendo o le estás ayudando.
No ayuda nada exigir sin aportar.
De lo contrario solo le estas transmitiendo negatividad y haciendo perder el tiempo a esa persona.
Porque a ti no te gusta que te jodan el día, pero no te importa jodérselo a los demás.
A mí es complicado amargarme un día, pero a otros les puedes hacer mucho daño.
Así que observa a tu alrededor para no perder la humanidad, porque cuando te vayas al hoyo es lo único que vas a desear no haber perdido. Y si no tienes tiempo de observar a tu alrededor observa esto todos los días aquí.
