La salvación de los indecisos
Eso es lo que puedes ser.
¿Cuántas veces en tu día te cruzas con gente que te dice "no sé"?
¿Cuántas personas te consultan cómo hacer según qué cosa o qué harías tú?
O mejor, ¿cuántas veces te piden tu opinión o, directamente, que decidas tú sobre un tema?
Cuesta tomar decisiones.
Cuesta hacerse responsable de las cosas.
Ya lo he mencionado en otras ocasiones.
Es una oportunidad para abrirte paso entre tanta indecisión.
Las personas no están preparadas hoy día para tomar decisiones.
Cuanto menos decisiones importantes.
Yo a las decisiones importantes son a las que menos atención les intento prestar.
En serio, me encanta tomarme las decisiones importantes a la ligera.
¿Nos vamos a vivir juntos después de un mes de relación?
La respuesta fue sí.
¿Me compro este coche u otro?
Si ya he visto este y me ha gustado adelante con este, ¿para qué voy a ver más?
Creo que 2 semanas me hciieron falta para tenelro todo listo.
¿Me voy a vivir a otra ciudad?
En apenas un mes ya estaba con la mudanza hecha y todo
Tomar este tipo de decisiones a la ligera no es fácil.
Lo reconozco.
Pero hay algo particularmente atractivo en tomar este tipo de decisiones a la ligera, en quitarle hierro al asunto.
Es como que vives con la conciencia más tranquila.
Nada te reconcome por dentro y te ayuda a relativizar todo.
Personalmente siempre digo que odio a dos tipos de personas: a los mentirosos y a los indecisos.
Sobre todo cuando las indecisiones de la gente me perjudican directamente a mí.
Si hay algo que necesito de las personas es que tengan las cosas claras, aunque se equivoquen.
Asumo que una persona que se limita a tomar decisiones importantes como si fuera al quiosco a comprar chicles, va a tener una tasa de fallo alta.
Pero lo que me importa no es que la tasa de fallo sea alta.
Es que la de aciertos sea más alta que la de fallos y, al principio puede no ser así, pero en cuestión de meses la relación se invierte.
Porque hay algo mágico en estrellarte tomando decisiones a la ligera.
Algo que te curte.
Observa.
Es como entrenar con espadas de verdad o de madera.
El tajo es real, mientras que lo otro es una contusión de la que pronto te recuperarás.
Así es la vida, quienes más tajos tienen más capacidad para acertar en decisiones importantes tienen.
Por eso me gusta tomar decisiones importantes de forma rápida.
Porque si hay algo que he observado, es que lo importante es avanzar e iterar sobre los problemas que se presentan.
Si hay algo que he observado, es que los que toman decisiones y avanzan son personas más valiosas aunque se equivoquen, porque al menos cuentan con la valentía de haber dado el paso, mientras que las personas que dudan y no toman acciones solo pueden ser considerados positivamente por haber analizado al detalle la situación y ser conservador.
Prfff aburridísimo.
Igual que observar y no contarlo.
Esto me di cuenta hace tiempo, por eso observo y lo cuento, todos los días aquí.