Si no tienes voluntad piensa en los tronos

Observa.

Ayer estuve 4h de pie, esperando un trono que después no salió.

Yo no soy muy fan de la Semana Santa, pero tuve la oportunidad de vivir la experiencia más de cerca con la familia con la que me había comprometido a verlo y eso me resultó curioso. 

Algo nuevo que observar.

Para la hora del café ya estábamos en la puerta de la cofradía.

Te hablo de las 3 y media de la tarde.

Desde entonces, esperando a los preparativos, saludando y siendo presentado a la gente.

Hasta ahí bien.

Luego empezó la toma de posición.

Un juego estratégico, casi de ajedrecista profesional que implica:

  • Tomar posición para tener el mejor punto de vista.

  • Darte codazos con la gente para que no se te cuelen.

  • Dejar un pasillo para que la gente pase por detrás.

  • Y desarrollar la inmunidad olfativa para las colonias de los chavales y quinceañeras que se restregaban con la multitud.

Hasta ahí bien.

Luego empezó lo aburrido.

Debido al mal tiempo, se estaba posponiendo la salida de las figuras.

Y no había mucho que hacer.

No podías moverte del sitio porque lo perdías.

Así que eso te limitaba las oportunidades a pensar y charlar con la gente.

Y yo hablaba con la gente, pero me dan más ganas de pensar que de hablar cuando no consigo tener conversaciones interesantes con la gente.

Entonces yo observaba.

Observaba la voluntad de la gente que estaba ahí.

Pensaba en que había gente que llevaba esperando todo el año y que estaba ahí ese día.

De pie.

Durante horas.

Sin quejarse.

Con ganas de ver a su Cristo o su Virgen.

Y observaba lo fácil era para ellos estar ahí durante horas y qué complicado les resultaría ejercer esta voluntad para otras cosas.

Es curioso ver cómo una persona puede estar 4h de pie esperando a que salga un trono, pero no es capaz de estar 1h en el gimnasio o dedicarle 30min al día a leer.

Es, claramente, una cuestión de intereses.

Y sé que no soy un erudito.

Que no te desvelaré nada y que esto ya lo sabías.

Pero yo estoy escribiendo sobre ello para que otros lo lean.

Yo estoy poniendo la voluntad de invertir el tiempo en dejarlo plasmado para que otros reflexionen sobre ello.

Y eso es lo que intento.

Para que puedas reflexionar sobre lo que observo, pongo la voluntad de escribir una observación todos los días aquí.