Sordo como una tapia
Observa.
Uno de los mayores despistes que tenemos en la actualidad es no escuchar lo que nos dicen.
No porque no quieras.
Es que a veces no te das cuenta.
Pero sí.
Muchas personas es que no escuchan porque no le sale de los genitales.
Sean masculinos o femeninos.
Espera.
Espero no haberme equivocado con ese binomio.
No sé si puede haber genitales que no sean de esos dos géneros.
A ver…
Que nos dispersamos.
Tus orejas.
¿Tú las usas?
Es que hay un hábito muy común.
Que es hablar y no escuchar.
Incluso no hablar, pero tampoco escuchar.
Eso ya es el colmo.
Porque quieres contar tu historia.
Es normal, todos queremos contar historias.
A las personas nos encantan las historias y más contarlas.
Y ya ni te cuento si tú eres el protagonista.
Pero.
Es importante que no pierdas la capacidad de escuchar.
No de oir.
De escuhcar.
De entender profundamente lo que te están diciendo.
Si no sabes de lo que te hablo es que aún no ha llegado tu momento.
¿Cómo puede llegar tu momento?
Conócete mejor.
Ayer hablaba por ejemplo de los 7 pecados capitales.
Puedes empezar por ahí.
Y luego, podrás empezar a escuchar a los demás.
Podrás dejar de estar sordo como una tapia.
Y tu vida mejorará.
Y los de tu alrededor te apreciarán más.
Y podrás escuchar mejores historias.
Y, cuando tengas que hablar tendrás mejores historias que contar.
Pero para eso necesitas escuchar y observar.
Y puedes hacerlo.