Tu propósito no está en Nepal
Hay momentos en al vida en las que te sientes en medio de la nada.
Ni te llena lo que hacías antes.
Ni te llena la gente con la que te rodeas.
No me quiero poner dramas, pero es verdad que hay momentos de tu vida en los que te sientes un poco vacío.
Es como que no tienes respuesta a muchas preguntas que te van surgiendo.
Haz el ejercicio de preguntarte si tienes propósito, si lo has encontrado ya.
La pregunta es sencilla pero dura de responder si tu respuesta es “no”.
Pero eso te tiene que dar igual.
Si es que no es que no. Tienes que ser sincero, porque siendo sincero es como se avanza en esta vida.
Esto te puede pasar. O quizá ni te has parado a pensar en ello.
Pero puede ser que hasta que no encuentres ese propósito tampoco encuentres respuesta a esas preguntas que te haces.
Y encontrar tu propósito no es difícil. Solo requiere un año de trabajo.
No hace falta que te vayas a Nepal de retiro espiritual ni que te compres una esterilla en el Decathlon y vayas todos los días a yoga y meditación.
Bueno, esto a lo mejor te ayuda, pero el caso es que te hace falta un año de trabajo en ti mismo.
Observa.
Por si te sirve de ayuda.
Ayer me preguntaron algo relacionado con esto:
“Se te ve muy puesto, con la cabeza bien amueblada y que sabes lo que quieres”.
Está claro que esta persona no se ha cruzado con muchas personas con un propósito claro en su vida.
Y es normal.
Poca gente tiene claro su propósito en la vida y simplemente se deja llevar.
No es malo. Es otra forma de vivir la vida.
Tú elige cómo quieres vivir tu vida que los demás elegirán la suya.
“¿Por dónde me recomendarías empezar para tener las cosas un poco más claras y gestionarme bien?” Me preguntó.
Mi respuesta fue: “lee”.
Si no sabes por dónde empezar lee.
Leer abre tu mente. Te ayuda a entender cómo se expresan los demás, a descubrir qué hay más allá de tu ombligo.
Y eso te va a ayudar a encontrar tu propósito o, al menos, acercarte un poco más a encontrarlo.
Pero un momento.
No solo debes leer. También debes actuar.
Pon en marcha lo que lees.
Actuar es más importante que leer.
La experiencia te transforma y la lectura te previene.
A través de la lectura me acerqué a mi propósito.
Y me di cuenta que una de las herramientas más poderosas que me ayudan a conseguir mi propósito es la observación.
Y como sé que a ti también te va a ayudar te cuento algo cada día aquí.
